De Vadiello a Nocito  
El Guatizalema es uno de los ríos principales que atraviesan la sierra de Guara de Norte a Sur. En su largo discurrir por la intrincada orografía del parque natural, esculpe tajos y esculturas de roca que eleva por encima de su cauce. En el tramo comprendido entre Nocito y el pantano de Vadiello, abre un pasillo de bosques de carrasca y quejigo, hundido entre las faldas de Gabardiella y las canales enhiestas del Fragineto. Por allí marcha un camino antiguo, de Carboneros, recuperado ahora por las administraciones públicas siempre pendientes de aumentar el bienestar de la ciudadanía. Albricias, con lo mucho que se agradece el equipamiento urbano para adecentar un camino natural de toda la vida. El camino natural de la Hoya de Huesca, así llamado por la autoridad. Un afán loable de promocionar la zona, pero con adornos mas propios de un parque urbano, y agrediendo a veces la belleza del monte con escaleras y alambradas inútiles. A saber dónde quedarán semejantes trastes dentro de cincuenta años; mientras tanto caminaremos entre el bosque y las flores, sin desorientarnos con añadidos artificiales.
Es una travesía de cinco horas que une dos lugares emblemáticos del parque, Nocito y Vadiello. Semejante duración excluye la posibilidad de hacer la ida y vuelta en el día, serían diez horas y un desnivel exagerado para gente normal, la que no va corriendo por la montaña. En ese caso, sin tener un coche de apoyo, autobús, o sin la opción de pernoctar en algún alojamiento de Nocito, la lógica aconseja hacer el recorrido hasta la mitad y dejar la otra parte para mejor ocasión. Más tiempo y expectativas de disfrute por los parajes solitarios de Guara. Las dos etapas propuestas convergen en el mismo lugar, al que vamos a denominar con el nombre del Vado del Proyectil. De disponer solamente de un día para hacer la excursión, resulta tal vez más espectacular el recorrido de Vadiello al Vado, descrito en la etapa número 2.

Enlace a la descripción de la Etapa 2, de Vadiello al Vado del Proyectil: ETAPA 2 Duración, 5 horas; Desnivel, 700m

Etapa 1: de Nocito al Vado del Proyectil.
-inicio, Nocito a 920 metros de altitud.
-desnivel, 700 metros de subidas y bajadas.
-duración, de 5 horas y media a 6, en total.
-Vado del Proyectil, a 750 metros de altitud.

en llegando a Nocito hay sitio para dejar el auto bajo la sombra de unos árboles, cerca de un panel grande de información sobre el camino natural de la Hoya de Huesca. El tramo inicial discurre por una pista de tierra sin restricciones a la circulación, hasta llegar a un aparcamiento improvisado en una pradera, justo al comienzo de la ruta clásica de ascenso al Tozal por el barranco de la Pillera. Siendo el nombre de la travesía de Nocito a Vadiello, y teniendo en consideración la holgura y benevolencia de partir el recorrido en dos jornadas, sería indecoroso y miserable el hecho de no salir andando desde el mismo pueblo. Además, el firme de la pista se encuentra en un estado de abandono a las irregularidades del terreno, y los bajos del coche lo agradecerán.







Sin cruzar el río por el hermoso puente de supuesto origen medieval, y sin entrar al pueblo al que podemos dedicar una visita al finalizar la jornada, tal vez con cerveza incluida si está abierto el bar, la pista deja el ramal de entrada al camping y avanza entre chopos y campos de forraje en un llaneo la mar de agradable. Se dejarán a los lados fincas de propiedad particular y algún huerto, con la majestuosa vertiente norte del Tozal enfocada en nuestra mirada.







A mitad del recorrido pistero sale un desvío indicado que retorna al pueblo mediante una senda, pero nuestra marcha prosigue hacia delante, en una bajada paulatina que nos lleva a la zona de aparcamiento del barranco de la Pillera. Hay indicaciones de la subida al Tozal, y otros coincidentes con el camino natural hacia Santalorieta y el dolmen del Palomar. Llevamos 25 minutos de andadura desde el pueblo.







El carril prosigue hasta acercarse a la vera del río Guatizalema. Tras pasar una vieja barrera, dejamos a la izquierda un vado hormigonado que atraviesa el cauce, y el camino natural se convierte en un sendero que avanza por la orilla derecha. El pico de Corcurezo se alza sobre las aguas de un barranco sombreado de pinar, mientras pasamos bajo un saliente rocoso que podría servir de cobijo ante la lluvia.







Durante el recorrido aparecen numerosas indicaciones del camino natural en forma de balizas de madera. Entre vegetación de ribera, el sendero vadea las aguas del barranco del Cajical gracias a una pasadera de piedras. Luego viene una cuesta que nos lleva hasta un cruce señalizado.







En el cruce se deja la senda que sigue en línea recta hacia el dolmen del Palomar, para seguir por una serie de peldaños de madera que bajan con decisión hasta empalmar con una pista. A la vuelta, si queremos, se puede tomar este carril que vadea en bastantes ocasiones el cauce del Guatizalema para regresar al aparcamiento de la Pillera, evitando el tramo de subida y bajada que efectúa el sendero.







Unos metros después de abandonar la pista, conviene estar atento a una vereda entre el matorral que enseguida nos deja junto a una poza gozosa de aguas turquesas. A la vuelta, si el calor aprieta como aconteció en este día, la parada será obligatoria.







A lo largo del recorrido serán pocas las veces en las que el camino se acerca al río. Iremos casi siempre a bastante altura respecto al cauce, y habrá que aprovechar los momentos donde la traza de la senda avanza junto al curso de aguas o las cruza, como sucederá mas adelante. Ahora la marcha es suave, con pequeñas cuestas o breves descensos, teniendo a la vista la falda boscosa del pico Fragineto y asomando al fondo el relieve piramidal del Borón.







Durante la mayor parte del trayecto, se disfruta con la sombra de un bosque en el que predominan las carrascas y quejigos, aunque también crece el pino, altos bojes, madroño, tilo, incluso hayas y algún tejo. También destaca el colorido de las flores que adornan el camino en esta época primaveral; sanosa, lino, eneldo, gladiolos, oreja de onso, orquídeas...











Unos peldaños de madera nos bajan hasta el cauce del río. Antes pasaremos por uno de los muchos carteles del camino natural, anunciando la distancia en kilómetros entre Vadiello y Nocito. El vadeo resulta sencillo gracias a una hilera de piedras grandes, sin necesidad de mojarse las botas o descalzarse.







Al cambiar de orilla la pendiente aumenta en una cuesta que nos eleva respeto al cauce del río. El sendero alcanza un colladete, junto a un peñasco característico por estar cubierto de una frondosa yedra y unas carrascas en su cúspide. Al otro lado de este tozal, al cobijo de la pared hay un redil de piedras, antiguo refugio pastoril. También en este día vi unas cintas de plástico que al parecer bajaban hacia el curso del río.







El camino alcanza una zona de antiguos bancales, con restos de tapiales de piedra bajo las estribaciones de la cresta de la Ronera y el pico de Fragineto. Las balizas de madera ayudan a seguir la traza del sendero, mientras se alternan tramos abiertos con pasajes bajo el follaje del arbolado. Así alcanzamos otro collado, junto a un enebro solitario, desde el que se obtiene una vista excelente del barranco del Guatizalema bajo los farallones del Borón.







Comienza ahora el tramo de bajada hasta el vado del Proyectil. Un descenso a base de lazadas cortas por dentro del cajigar, con una pérdida de altura considerable que a la vuelta se convertirá en un duro repecho.





Justo cuando termina la parte mas acusada del descenso y la pendiente aminora, sale un desvío a mano derecha que en esta fecha se encontraba indicado por un mojón de piedras. De tomarlo, se pierden 40 metros de altitud para alcanzar en cinco minutos el cauce del Guatizalema. La anchura y poca profundidad de las aguas no favorecen la opción del baño, pero de seguir por la orilla izquierda orográfica, contra la corriente, se alcanza en breve una zona de pequeñas badinas a la salida de un estrechamiento. Es un añadido a la ruta principal que merece la pena por lo tranquilo y refrescante del rincón.







La opción de bajar al vado del proyectil por el cauce del río resulta tentadora, pero la idea original era seguir el camino natural así que toca subir el desnivel perdido. Vamos a media ladera, por encima del barranco y dando vista a sus badinas y meandros. La traza es estrecha, cruza alguna pedrera, y tras una corta subida vuelve a descender con fuerza hacia el vado del Proyectil.







El proyectil es el nombre que recibe una aguja de roca esbelta y puntiaguda, justo encima del vado por donde el camino natural cruza el río y prosigue viaje hacia Vadiello. Junto al escarpado relieve del Borón, defendido por una farallón vertical muy elegante, estas esculturas de roca forman el paisaje tal vez mas espectacular del presente recorrido. Una postal sobre la naturaleza agreste y salvaje de Guara.







Admirando los farallones abruptos que el río Guatizalema ha labrado durante siglos, el camino desciende por una pendiente resbaladiza de piedra suelta hasta la orilla. Allí nuevos carteles informan de la distancia restante hasta el embalse de Vadiello, y también de ser prudentes a la hora de cruzar el río por la eventualidad de una crecida o contingencia parecida.







La contingencia que nos sale al paso es la ausencia de una de las rocas de la pasadera del Vado, al menos en esta fecha, como se observa bien en la imagen anterior. De mayor provecho habría sido destinar el presupuesto de las escaleras y alambradas inútiles del camino, en una pasarela o puente permanente que salvara las aguas del río sin problema. Servidor ha sido testigo del importante caudal de agua que baja por este punto del río tras un periodo de lluvias, con la imposibilidad de efectuar un vadeo seguro. Por suerte será normal encontrar el cauce flojo y remansado, con la posibilidad de cruzar a la otra orilla sin ni siquiera descalzarse, de piedra en piedra. Además nuestra ruta termina aquí, sin necesidad de vadeo alguno.







Si hemos de regresar a Nocito en el mismo día, parece sensato finalizar el trayecto de ida en este vado del Proyectil. Por tiempo y desnivel sale una buena jornada de senderismo, y además el siguiente tramo hacia Vadiello presenta una cuesta de gran pendiente y un desnivel cercano a los 200 metros que augura esfuerzos inútiles. Más tiempo para disfrutar con la garganta y las pozas del Guatizalema.